I CARRERA OFICIAL "SAN NICASIO"

Carrera Popular de San Nicasio, domingo 12 de octubre de 2008, a las 10 h. en Leganés, 10 km. y 300 metros.

Asistentes y orden de llegada: Nano, Juáncar, Don Carlos (45’02’’), Pedrín, Caye, Josemi y Soraya. Debido a los incidentes, no fue posible anotar los tiempos. Si nos los hacen llegar, los pondremos.

Incidentes:

MUCHÍSIMOS. El Burro Veloz acabó en la Comisaria de Leganés denunciando el robo del que fue víctima. Unos hijos de puta en el transcurso de la carrera se dedicaron a romper la ventanilla del coche de Caye y a llevarse nuestras bolsas de deporte. Así hicieron con unos veinte vehículos de corredores (entre los que estaba el de la Panda del Sebas), por lo que imaginamos que estos hijos de la gran puta estaban organizados. De regreso de la carrera, en el aparcamiento del Día que hay yendo al cementerio, vimos que la puerta del coche estaba abierta y una ventanilla rota, y no había ni una bolsa de deporte, salvo la de Caye que no era una bolsa de deporte homologada, sino una bolsa guarrindonga de plástico, gracias a la cual no se llevaron sus pertenencias. ¡Bastante tuvo con el “estropicio” del coche!

La comisaria parecía el vestuario de un equipo de fútbol, con tíos en calzones y una camiseta amarillo fosforito, que era la que daban en la meta. Hicimos la denuncia los cinco de Leganés juntos, porque Josemi y Soraya tuvieron la gran potra de que no les tocase la china, aunque el coche de Soraya estaba cerca del de Caye. No obstante, en la Comisaria nos echamos unas risas y, de haber tenido unos eurillos, se los habríamos dado al oficial de la Policía que no tenía folios ni para darnos una copia de la denuncia a cada uno.

Hemos aprendido una nueva lección de corredores (¡la carrera empieza cuando uno aparca, amigos!), y, por suerte, no nos ha pasado nada a nosotros, que es lo más importante. Dicho lo cual, nos cagamos en la puta madre y en todos los muertos de los cabrones que nos robaron y ojalá que se estrellaran en la puta furgoneta donde debieron recoger el botín y escapar. En ese botín iba nuestra querida libreta roja, con este blog escrito a mano, la mejor amiga del corredor, la memoria colectiva de la amistad y el tesoro que algún día subastaríamos en internet. No importa, escribiremos otra, pero a esta siempre la recordaremos y la llevaremos en nuestro corazón.

Que conste que somos gente de paz y que no deseamos mal a nadie, pero tampoco lamentaríamos alguna desgracia en quien roba a pobres desgraciados como nosotros. En fin, alegría, salud y “força al canut”, y a seguir disfrutando del atletismo y de la amistad. Más que nunca gritamos: ¡VIVA EL BURRO VELOZ! ¡VIVA EL BURRO VELOZ! ¡VIVA EL BURRO VELOZ!