domingo, 15 de noviembre de 2009

Entrenamiento n.º 19 (San Alberto Magno).

Asistentes: Juáncar, Pedrín y Carlos. Nano se une en el desayuno.
Distancia/tiempo: unos 19,5 km., en 1h. 38' 08'', por el Mirador de San Fernando, el Mirador del Burro y La Serna.
Porras: Nano.
Tiempo atmosférico: Nublado, T. máx. 21º, T. mín. 13º ( AEMET).
Anotaciones:
Dentro de una semana nos espera la ½ maratón de montaña de Jarandilla, de modo y manera que hay que mantener la forma que cogimos el domingo pasado en Moratalaz. Sólo tres, como los toreros a las cinco de la tarde, como el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo de la Trinidad, como el Cielo, el Purgatorio y el Infierno de Dante, como las tres edades del hombre del Criticón de Gracián. ¡Ya seremos más! Tres es compañía pero, pensando en los ausentes, es soledad.
Dedicaremos unos días en Platero y yo a la desgracia de un potro. Todito todo lo cuenta Juan Ramón, ya veréis. Hoy nos quedamos en la bravura del joven animal. Ahora bien, como nos ocurre a los humanos, no todo será vida y dulzura para el potrillo. ¿Qué les pasa a los humanos? Llega el tío de la cuchilla, el del mazo, el de la patada en los huevos, y te pega una pasada que te baja los humos. Somos potros en peligro. C’est la vie!

PLATERO Y YO (22)

EL POTRO CASTRADO (1.ª parte)

Era negro, con tornasoles granas, verdes y azules, todos de plata, como los escarabajos y los cuervos. En sus ojos nuevos rojeaba a veces un fuego vivo, como en el puchero de Ramona, la castañera de la plaza del Marqués. ¡Repiqueteo de su trote corto cuando, en la Friseta de arena, entraba, campeador, por los adoquines de la calle Nueva! ¡Qué ágil, qué nervioso, qué agudo fue, con su cabeza pequeña y sus remos finos! (Continuará)

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